La lucha contra el cáncer tiene su base en la investigación científica. Por desgracia, investigar tiene un coste y este no es precisamente bajo. Por eso, aunque el estado financia muchas investigaciones, algunas de ellas muy importantes, parte del trabajo recae en las clínicas de capital privado. Estas clínicas llevan a cabo un trabajo muy importante por partida doble, ya que por un lado trabajan directamente con los enfermos y por otro, con los investigadores.
Cuando se trata de contratar investigadores es muy importante contar con los mejores en su campo, con los mejores expedientes y con auténtico interés en desarrollar su carrera en la lucha contra el cáncer. Para conseguirlos existen recursos como sacar una Beca investigación cancer que permite a quienes la ganan formarse con los mejores investigadores y, a quienes la convocan, dar una oportunidad a los mejores expedientes para poder llevar a cabo este importante trabajo.
Gracias a este tipo de becas se pueden llevar a cabo investigaciones muy importantes que, aunque a menudo no tienen una gran repercusión en los medios de comunicación, si la tienen en la lucha contra el cáncer. Paso a paso, se van produciendo avances que se van sumando a los anteriormente existentes hasta que se consigue un avance significativo. Este sí aparece en los medios de comunicación, pero para que se produzca es muy importante el trabajo previo.
Pero, ¿cómo financian las clínicas privadas este tipo de becas y de trabajos de investigación? Lo hacen por varias vías. Una de ellas es la de las farmacéuticas. Con frecuencia, se trabaja con compañías farmacéuticas. importantes que financian trabajos para conseguir mejorar medicamentos ya existentes o sacar al mercado nuevas opciones de tratamiento.
Las compañías farmacéuticas. son una gran fuente de financiación, pero no son la única. También se financian con parte del capital que ganan en su trabajo con los pacientes. De esta manera, los pacientes que acuden a estas clínicas a tratarse saben que parte de los beneficios que esta obtiene con sus tratamientos va destinado a luchar contra la enfermedad.
Por último, pero no menos importante, las donaciones de particulares. Estas donaciones se producen con frecuencia de manera anónima o con la máxima discreción. También se efectúan a través de actividades como conciertos o competiciones deportivas realizadas específicamente para este fin. Incluso hay proyectos que cuentan con socios que aportan un dinero cada semana para poder hacer realidad la financiación de investigaciones contra el cáncer.