Cuando se trabaja de manera profesional realizando trabajos de construcción, rehabilitación o reformas en edificios es necesario contar con herramientas muy potentes y de gran resistencia. Pero, además, es fundamental que estas herramientas puedan trabajar en cualquier condición, sin depender de una red eléctrica. Para esto, se usan las herramientas neumáticas que funcionan con aire comprimido suministrado por un compresor.
Además de cuidar la elección de las herramientas, también se debe de elegir bien el compresor que se va a utilizar, de modo que suministre suficiente potencia, que sea lo más ligero posible y que tenga una buena resistencia. El tipo más utilizado es el compresor de piston. Normalmente, funcionan con diésel y suelen tener un sistema anticongelante que permite que pueda estar a la intemperie el tiempo que sea necesario.
Los compresores pueden ser de muchos tamaños y el aspecto más importante es la presión que ofrecen. Normalmente, las herramientas exigen como máximo seis bares de presión y eso es lo que les debe de suministrar el compresor. Un compresor demasiado básico podría no valer para trabajos profesionales al no dar a las herramientas todo el aire que necesitan. Por ese motivo se encuentran compresores de precios tan variados y también de tamaños tan diferentes.
También se usan compresores neumáticos de pistón en el hogar. No es frecuente tenerlos en un piso o apartamento porque ocupan espacio incluso en los modelos más pequeños, pero sí cuando se dispone de un garaje. A lo largo de los años se les acaba quitando mucho partido, no solo para trabajos básicos como regular el aire de los neumáticos del coche, sino también para todo tipo de trabajos en el hogar: limpieza a presión de las piedras o escaleras de la entrada de la vivienda, del suelo del garaje o de la fachada; utilización de pistolas para pintar en el interior de la casa, logrando trabajos prácticamente profesionales con mucha facilidad; realización de múltiples trabajos de bricolaje.
Si eres de esas personas que disfrutan del bricolaje y tienes espacio para un compresor en tu garaje, descubrirás que las herramientas que puedes utilizar con él son muy variadas y te ofrecen muchas posibilidades para llevar a cabo todos tus proyectos. Y sin tener que depender de enchufes de ningún tipo, por lo que podrás trabajar incluso si tienes desconectada la electricidad, por seguridad, en alguna de las habitaciones.