Piso nuevo, vida nueva. Por fin hemos conseguido vender el piso antiguo lo que nos deja mucho más tranquilos para concentrarnos en el pago de la hipoteca del nuevo. Decidimos arriesgar un poco y ya se sabe que cuando se arriesga con el tema de la vivienda, lo puedes pagar muy caro. Pero no podíamos seguir en el piso antiguo por una cuestión de espacio. Pero ahora ya está vendido y el temor a quedarnos más tiempo de la cuenta con dos hipotecas se ha desvanecido.
Y aunque todavía queda mucho por hacer, lo que tenemos entre manos es mucho menos delicado, como por ejemplo vestir las ventanas. En la casa anterior teníamos cortinas, y ahora estamos estudiando otras opciones. ¿Y cuáles son? Por un lado, están las propias cortinas tradicionales. No soy de esas personas que rehúye las cortinas, no me parece mala opción en absoluto en según qué casos, pero es verdad que con el estilo de la nueva casa sí que deberíamos probar otras alternativas, al menos para ver qué tal queda.
Yo quedé enamorada de un panel japones que vi en casa de una amiga. Era un salón grande y muy luminoso, pero en vez usar cortinas o estores tradicionales apostaba por este estilo mucho más delicado y sofisticado. Al final, en una casa debes saber combinar el espacio, que es la base, con el diseño, que es la vestimenta. Las dos facetas deben ir de la mano para que el resultado sea positivo. En mi caso, el salón no es tan luminoso como el de mi amiga, pero quizás sea un poco más grande, así que unas cortinas tradicionales no son la mejor opción para este espacio.
La cuestión es que no es tan sencillo encontrar un buen panel japones como otro tipo de cortinas y estores. Aunque es verdad que cada vez hay más oferta en internet y en tiendas físicas, el panel estilo japones no está tan asentado como otros estilos. Y me gustaría que fuera un panel a medida para que se adaptara a la perfección al espacio. Aunque es una modalidad un poco más cara creo que es la solución ideal.